lunes, 10 de enero de 2011

lo que me dejo la navidad




Lo que me dejo en las fiestas de natividad fue una idea clara, pero de una aplicación bastante difícil, ya que depende, de una gran capacidad de aceptación de los demás, esta enseñanza es la tolerancia y
 LA BUENA VOLUNTAD
 Evangelio de San Lucas  2,14
Gloria en las alturas a Dios, Y en la tierra paz, y en el hombre buena voluntad.
Sagradas escrituras 1569.
Suena a una frase de cajo, se repite casi a diario, pero en nuestro país con tantas formas de violencia, se presenta esta, la cual nos aniquila en nuestra cotidianidad,
A continuación leeremos un artículo del periódico  EL TIEMPO  del 5 de diciembre de 2010  
Intolerancia En Bogotá: 10 Casos Fatales
Esta semana fue noticia el episodio de un energúmeno que disparó contra un bus escolar.
Basta sólo un instante, un segundo de no reflexión para que se desate una tragedia. Eso es lo que a diario dejan muchos episodios de intolerancia: una estela de conflictos con consecuencias que se habrían podido evitar. El caso de un conductor que el lunes disparó contra un bus escolar porque no tuvo espacio para seguir transitando es el último capítulo de intolerancia que conmovió a Bogotá. Pero hay más y van desde una mala palabra hasta una disculpa mal aceptada. Por lo general los casos suelen estar asociados a tragos y armas. El año pasado, hubo 275 homicidios (16,1% del total) producto de riñas derivadas de acciones de intolerancia.
 1. Crimen en el portal Por haberle reclamado a un hombre que orinaba dentro del Portal Norte de TransMilenio, Javier Andrés Pulido, obrero de 22 años, fue asesinado de una puñalada en el corazón. El caso ocurrió en el 2007. Pulido perdió la vida. Las imágenes quedaron registradas en las cámaras del sistema. Hubo capturas y sentenciados.
2. Todo por haberle dicho 'boyaco' Édison Rojas Pérez, de 25 años y estudiante de La Salle, asesinó de dos disparos a uno de sus compañeros de estudio, identificado como Esteban Antonio Calderón, de 24 años, porque le dijo 'boyaco'. El hecho ocurrió después de que los jóvenes tomaron trago.
 3. Por una apuesta Mario Rojas y otro cliente apostaron para adivinar el nombre del autor de un vallenato. Mario ganó, pero cuando iba para la casa fue abordado por el perdedor, que lo mató con un puñal.
4. Por una pelea En marzo de este año dos hombres se trenzaron a puños dentro de un bus de TransMilenio porque uno de ellos, sin culpa, regó gaseosa sobre la amiga de otro pasajero, que resultó ser patrullero de la Policía. La riña entre los dos hombres se trasladó a la estación de la avenida Caracas con 39 y terminó cuando ambos cayeron a la vía y murieron arrollados por un bus articulado.
 5. No le dieron paso y disparó Un hombre que se movilizaba en un Renault 18 se molestó porque no pudo continuar su camino en Suba, ya que otros dos carros estaban atravesados por problemas mecánicos. Sacó un revólver y les quitó la vida a tres personas que se encontraban en el lugar. El agresor aún está prófugo.
 6. Por un espejo Una mujer transitaba en su vehículo frente a un negocio de Bosa cuando el retrovisor de su carro golpeó a otra mujer que jugaba rana. La conductora bajó del carro para disculparse, pero uno de los hombres le lanzó una botella e hirió a uno de los hijos de ella. Luego, el cuñado de la mujer del carro regresó armado para cobrar venganza, pero disparó contra otro menor, que quedó cuadripléjico.
 7. Por una moneda Juan Camilo Romero, de 19 años, se encontraba en un bar ubicado a una cuadra del parque principal de Engativá cuando pateó sin querer una moneda que se le acababa de caer a uno de los clientes del bar. Esa simple actitud terminó por desatar una pelea, que terminó cuando Romero fue asesinado de una puñalada en el pecho.
 8. Por unos chicles Pedro Valbuena, de 22 años, estaba en una fiesta en Usme cuando el estudiante de bachillerato Juan Sebastián González le pidió que le diera candela para encender un cigarrillo. Valbuena le dijo que no fumaba y su agresor le pidió unos chicles, pero como no obtuvo respuesta optó por apuñalarlo. El caso ocurrió en febrero de este año
. 9. Regó la cerveza Fredy Alonso Ojeda Benítez, de 29 años, quien se ganaba la vida como operario de una máquina cortadora de lajas, tomaba licor en una tienda ubicada en la vía a La Calera. De pronto se levantó de la mesa y accidentalmente regó una cerveza sobre otro cliente, que no aceptó disculpas: sacó un cuchillo y lo asesinó.
 10. Por una empanada Carolina Celis, periodista de 30 años, fue agredida con el pico de una botella el pasado 4 de septiembre. El autor, el productor Ricardo Ayala, se enfureció porque la joven y su esposo pidieron las últimas empanadas de un negocio ubicado en la zona rosa. Celis quedó con heridas en la cara.
Que nos deja de reflexión estos diez lamentables caso de intolerancia.
 La intolerancia se ve reflejada en  estúpidas y necias sentencias como las siguientes: “Si no estás conmigo estás contra mí”; “Todo o nada”; “Fuera de la iglesia no hay salvación”;   “ Si no crees en mi (Dios) eres un ateo infiel”;  “Si no estás con Jesús estás con el demonio”;  “El estado soy yo”;  “Si pierdo las elecciones democráticamente, haré oposición para no dejar gobernar al que me ganó”;  “Soy demócrata siempre y cuando los demás comulguen con mis ideas”;  “Los que tienen un espíritu contrario al nuestro son enemigos peligrosos”;  “Yo hago lo que ustedes quieran siempre y cuando hagan ustedes lo que yo quiero”, y otras tantas  pérfidas consignas con las que el Gran Engañador ha contaminado la mente y el espíritu de aquellos incautos e ignorantes,  intransigentes que no han comprendido que ni siquiera el mismo Dios atenta contra la libertad de albedrío que mueve nuestras almas.
Por eso Hay que buscar en que estamos fallando, en  nuestra vida, por que   pedirnos el rumbo, nos volvemos  indiferentes e intolerantes al prójimo,
 Hay que saber primero ¿Qué es la tolerancia?
 El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española da la definición; De la «tolerancia» en manera siguiente:
«Tolerancia...acción o efecto de tolerar.»
 Otro significado es «respecto y consideración hacia las opiniones o prácticas de los demás, aunque repugnen a las nuestras.» Además, el verbo «tolerar» es definido como: «sufrir, llevar con paciencia» y «permitir algo que no se tiene por lícito, sin aprobarlo expresamente.» A veces, cuando predicamos la verdad de Dios en la biblia como la entendemos, algunos nos acusan de ser intolerantes. Dicen que no se debe criticar ni juzgar la creencia de nadie, porque los cristianos deben de ser tolerantes.
 La tolerancia no implica contubernio ni complicidad con quienes tengan costumbres reñidas con la moral, la ética y las buenas costumbres.  Debemos erradicar de nuestras costumbres los malos hábitos de censurar y prejuzgar a quienes  son iguales a nosotros, con los mismos errores y con la misma ansiedad de superación social y espiritual.Hermanos, meditemos sobre la intolerancia, porque muchas de nuestras tribulaciones, de nuestros problemas y de nuestros conflictos son  consecuencia de esta nefanda actitud irreflexiva que gobierna los sentimientos y actos de quienes aún no aprendieron a ser tolerantes.
La clave está en la “buena voluntad”. Si  tenemos  “buena voluntad”
Para con amigos y enemigos, para con los que simpatizan con nuestras ideas y para los adversarios,
 Entonces escucharemos que en Belén ha nacido un niño
 Y sólo tendrá para nosotros un significado folclórico, un motivo de fiesta o ceremonia,
 pero no podremos vivir a plenitud la alegría que tuvieron los humildes pastores al enterarse, por voz de los mensajeros de Dios, de que había llegado la plenitud de los tiempos y que El Único Mesías, el prometido por Dios mismo, se ha hecho carne y habita entre nosotros.

 (“hombres de buena voluntad” significa aquellos que tienen buenas intenciones hacia sus semejantes y trabajan para ayudarlos)